El patrimonio Mural de Federico Cantú
refleja en su iconografía, un buen numero de representaciones de la justicia
y la violencia : Esta pasión se ve plasmada en sus
murales religiosos como el de Pasadena California 1928, Parroquia de San Miguel
Allende 1943, en la pinacoteca virreinal 1948 o la capilla de los misioneros de
Guadalupe UIC de 1958, pero
También en sus pasajes históricos como la caída de Tenochtitlan , Caída de Troya 1950 , Los Cuatros
jinetes del Apocalipsis en el MUSEO RAGIONAL DE MORELIA 1955, solo por citar
algunos .
Sin embargo hoy nos referimos a la
violencia dentro del deterioro y el olvido del patrimonio mural de México,
donde un buen numero de murales de los grandes maestros han sido destruidos
parcial o totalmente. Este es el caso de la obra del desaparecido Bar Papillon
donde Federico Cantú y Roberto Montenegro desarrollaron el tema en torno a la
figura Arlequín en 1934 y que a la muerte de Cantú en 1989 y después de las
notas periodísticas referentes al deceso
del artista aparecerían cuatro paneles recuperados de este Bar Papillon , dos de Cantú y dos de Montenegro dentro
de la Colección del legado de León Tissot.
Vida Pasión y Muerte de Arlequín tema
iniciada en Montparnasse en 1924 fue el nombre que Federico le dio a la obra por encargo para el
Bar Papillon y En donde el artista mostraba la vida de arlequín Riviere a gauss
( Montparnasse) Rivere a duat (Montmatre )
Esta visión atípica al muralismo nacionalista, de momento causo la critica de los tres
grandes. Pero No es casual que
Montenegro y Cantú sean los pintores que aborden el tema de Arlequín ya que ambos degustaron las vanguardias
Europeas que veremos reflejadas a lo largo de su legado artístico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario